Mientras Costa Rica está tomada por el sicariato y el narcotráfico, aumenta la inseguridad ciudadana y los Costarricenses tenemos que vivir encerrados y los delicuentes pulúlan por las calles de nuestra amada patría, tanto el Fiscal General Carlo Díaz y el Director del Organismo de Investigación Judicial Randal Zúñiga, hacen alarde de sus altos niveles de testosterona y dotes de conquistadores, el primero cambiando de novia en el Poder Judicial como quien cambia de calzoncillo, literalmente, trasladándolas de puesto, dando ascensos y aumentandoles el salario, viajando como si el mundo se fuera a acabar, el segundo, no es una, no son dos, no son tres, no son cuatro, en apariencia son más de cinco que han caído rendidas a sus encantos en los últimos meses. Y es que, les soy honesto, no tengo envidia, tengo esperanza porque en apariencia ser feo está de moda en Costa Rica o será otro motivo como por ejemplo, la información judicial de primera mano, que estos señores pueden compartir lo que causa curiosidad o atracción?. De los reportajes que todos los Costarricenses pudimos ver por Central Noticias, se destaca que, el ahora Gigoló del OIJ hasta informaba a sus amores donde estaba realizando allanamientos y su ubicación en tiempo real, información codiciada por los grupos de crimen organizado, pero, si enviaba esta información a sus diferentes amantes, que no sería capaz de decir en el lecho de la pasión?. Cúanta información habrá compartido de allanamientos, prófugos, estrategias policiales y próximas detenciones, así como, información importante de los extraditables.
Y es que la sabiduría popular Costarricense es clara en indicar que JALAN MÁS UN PAR DE TETAS, QUE CIEN CARRETAS y en el caso del Fiscal General Carlo Díaz y el Director del OIJ Randall Zúñiga se cumple este aforismo a cabalidad. En el caso del elegído por Dios, apesar de haber ocultado información a la corte plena y al Poder Judicial en pleno, sobre sus relaciones amorosas con subordinadas, favoreció de manera descarada nuevos puestos de ascenso y triplicó el salario de quien en ese momento, era su compañera sentimental, aún así se le evaluó con un 9 de 10, de verdad que no pueden ser más descarados, inventa, fabrica procesos en contra del Presidente de la República ofreciendo un criterio de oportunidad que no cumple con lo estipulado en el artículo 22 del Código Procesal Penal y lo peor de todo, continúa haciendo de las suyas en el puesto que Dios le dió, en el caso de don Randall Zúñiga, con paños tibios, la corte plena, haciendo el papel, lo suspende 15 días con goce de salario, decisión infortunada que asegura con mayor claridad que al Poder Judicial las víctimas no le importan para nada cuando se trata de proteger a su red de cuído. Según las publicaciones del periodista valiente Douglas Sánchez, no solo ha cometido actos atroces, si no tambien a coaccionado a las víctimas para que no digan nada, porque la investigación no va a ninguna parte, porque ya él, lo hablo con su amigo Carlo Díaz y más bien amenaza con que si habla, la va a mandar a matar. Si usted Costarricense tuviera una empresa y tiene a estos dos elementos como empleados los despediría? púes le tengo una noticia, el Poder Judicial, La fiscalía y el OIJ son empresas de todos y tenemos que despedir con prontitud a este tipo de empleados, sin bien es cierto, lo que ambos hagan en la intimidad, no es problema de nadie, cuando esa intimidad y sus diferentes amantes interfieren no solo en el trabajo que hay que realizar, si no tambien, afectan la institucionalidad, debemos ser energicos y solicitar que se vayan para la casa. En vez de detener la ola de delincuencia que azota nuestro país, en vez de meter a la cárcel a los delincuentes, en apariencia estos dos funcionarios estan bajandose la jareta, esto en clara complicidad con los magistrados quienes no solo, no administran de forma adecuada la justicia si no que, con meridiana claridad, no son respetados por sus subordinados. Todavia queda mucha tela que cortar ante tal tragedia griega que vivimos los Costarricenses. Mientras el Poder Judicial esta envuelto en líos de faldas, la cifra de muertes por sicariato sigue en aumento y el tráfico de drogas está en cada esquina de nuestros barrios y los jerarcas que tienen la obligación de trabajar para todos nosotros en contra de la delincuencia, andan disparándole a todo lo que se mueva.
